Ese término horrible, blogósfera, que dice muy poco.
En un comentario reciente, Ernesto recomendó un artículo del diario La Nación en Argentina sobre el estado actual de la blogósfera, a nivel global. El artículo ponía bajo una luz un poco preocupante el futuro este medio social – preocupante porque apuntaba a una tendencia de encogimiento asociada a una pérdida de energía.
El último informe del buscador Technorati, de septiembre pasado sobre el estado de la blogósfera, indica que ya existen en el mundo alrededor de 133 millones de blogs, aunque apenas el 1,1 por ciento se actualiza semanalmente.
La mayoría, según el informe, son apenas carátulas colgadas en la Web como barcos fantasmas con escasos contenidos y con aún menos comentarios de las audiencias interesadas en ese tipo de contenidos.
¿Esto quiere decir que los blogs pasan de moda? ¿Que se acabó la fiesta? Sí y no. Por un lado, es completamente esperable que en algún punto la explosión de contenido de los blogs se desacelere. Por otro, también es cierto que sería necio e ingenuo pensar que no serán los blogs un medio en algún momento también reemplazado por algún nuevo medio. La pregunta intrigante es cuál será ese otro medio, y qué características tendrá.
Los blogs tienen sentido en un momento de la historia, y sí creo que aún lo tienen – es exagerado decir que el medio está en picada o en caída sólo porque la enorme mayoría de blogs no son actualizados. Lo realmente importante es lo que están haciendo lo que sí están siendo actualizados – es allí donde se están jugando las transformaciones importantes.
Pero me parece que tenemos que ver ahora lo que está construyéndose en torno suyo, el “ecosistema en crisis” del que habla el artículo de La Nación. Los blogs más populares crecen, se articulan comunidades, y lo que en principio era sólo difusión de contenido en un formato simple se empieza a volver cada vez más una plataforma. Tómese por ejemplo el caso del Útero de Marita, que empezó como el blog del periodista Marco Sifuentes para ampliarse e incorporar Útero.tv, un proyecto más amplio de televisión en línea con un equipo de trabajo y una plataforma más elaborada. El mismo blog original ha pasado a articularse más complejamente con los videos y a formar un ecosistema más amplio. De la misma manera, blogs, canales de video, y ahora sobre todo redes sociales y aplicaciones construidas para ellas, se empiezan a articular de maneras cada vez más complejas en torno a comunidades, más que sólo ventanas de contenido.
No hay que se fatalistas con los blogs, pero tampoco aferrarse a ellos demasiado. Lo interesante es presenciar este momento para ver hacia dónde se mueve el asunto, y mejor todavía, formar parte del movimiento y llevarlo hacia algún lugar interesante.